Verso asimétrico de las 22


Le veo la frontera a los días, la arista, la comisura.
El cristal, el tamiz veo a los días. Una ventana hacia no sé dónde, quizá hacia utopía.
Por primera vez me siento dentro del día y esta plenitud llega con la certeza de lo efímero.
No veo dónde, pero presiento que acaban, como un verano.
Saber del final me calma y atemoriza. Sé que nada es más importante que encontrar tu mano en la noche.-

Guille